El 16 de junio de 2020 el presidente Carlos Alvarado firmó esta nueva normativa para aplicar en Costa Rica. Imagen con fines ilustrativos//Envato.
La Ley de Usura Crediticia es una norma que desde su creación buscó favorecer a los deudores y consumidores financieros, estableciendo topes a las tasas de interés que se cobran en distintos tipos de crédito. De esta manera, una tasa que exceda esos topes se considera de usura y puede denunciarse ante las autoridades.
Si bien es cierto, la creación de esta ley tuvo una buena intención, ha tenido algunos efectos negativos en la población y por ello, se cuestiona su implementación en diferentes campos. También se debate el hecho de que no se analizó con los parámetros internacionales, sin ver la importancia de quienes facilitan estos préstamos.
“Esta ley es muy general y alejada de la experiencia internacional. Hay un tope para créditos generales y otro para microcréditos, sin entender la variedad de característica de los deudores. No contar con un estudio técnico puede generar problemas como la exclusión de créditos a las personas, porque quienes otorgan estos créditos corren más riesgos con una tasa muy baja. No se trata de apoyar la usura pero sí entender estas variables para los topes”, citó Javier Cascante, ex Superintendente de Entidades Financieras.
Entendiendo el nacimiento de esta norma, es importante destacar cuáles eran las necesidades según las denuncias de la población, lo cual generó esta implementación.
Según Danilo Montero, director general de la Oficina de Protección al Consumidor Financiero, si se quería atacar las tasas de interés altas, principalmente en tarjetas de crédito, aquí se debió analizar quiénes se verían beneficiados y afectados, tanto personas con préstamos personales como los microempresarios.
“Parece que fue una solución en busca de un problema. En la Oficina analizamos endeudamientos de tarjetas, claro, pero son casos puntuales. Si estudiamos quiénes utilizan esas tarjetas vemos que los microempresarios fueron los principales afectados, debido a los trámites, mayores costos de formalización y pierden la oportunidad de créditos más acordes a su necesidad”, expresó el economista.
Además de ello, es importante destacar el efecto generado a nivel de delitos por el tema de los préstamos informales o “gota a gota”, como se les conoce; que destaca como una de las preocupaciones que vive el Organismo de Investigación Judicial (OIJ). En este sentido, en 2022 se han recibido 615 denuncias de extorsiones por estos créditos.
“Es delicado porque el objetivo son las personas que han sido excluidas del sistema financiero y quieren suplir una necesidad, pero al final terminan siendo extorsionadas, lesionadas o su deuda nunca acaba porque se aprovechan y hacen cobros muy altos de las tasas, no hay recibos ni documentos formales ”, citó Julio Hernández, jefe de la Sección de Delitos Varios del OIJ.
Es claro que la ley vino con buenas intenciones pero su resultado no ha sido el mejor y ha generado nuevos problemas. Por ello, la diputada Daniela Rojasha presentado el proyecto 23.101 “Ley de Promoción y Regulación de Microcrédito como Fomento para Inclusión Social Financiera”, como una de las soluciones para combatir las nuevas problemáticas.
Este proyecto busca, entre otras cosas, abrir las posibilidades de optar por microcréditos personales, para la mujer, productivo y para las personas que no tienen récord crediticio.
“Es una parte de la solución, se cree que bancarizar a las personas es incluirlas al sector financiero y no es así. Lo que queremos es que se cambie de proveedor de crédito, si por la Ley de Usura no califico para un crédito formal buscamos evitar tener que buscar por otro lado, donde sí son usureros y no regulados por esta norma”, citó Rojas.
A nivel de conclusión, todos los expertos concuerdan con la importancia de regular las tasas. Sin embargo, critican la falta de estudios para el desarrollo de esta ley de usura crediticia y ven como una buena alternativa una nueva iniciativa legislativa, quedaría un nuevo aire al sistema financiero y a la población que busca optar por soluciones crediticias.
Esto fue parte del webinar realizado por Lead University en alianza con la Asociación Costarricense de Microfinanzas (Asocomi), si querés ver el video completo podés ingresar en el siguiente enlace: https://fb.watch/fJwOszgOET/