Uno de los mayores placeres de la vida es comer lo que más nos gusta y hay infinidad de recetas que llegan a nuestro corazón y nos cautivan el alma por ser deliciosas. Sin embargo, no todas son lo suficientemente saludables.
Al parecer algunas de las recetas que son buenas para nosotros no son tan agradables. A continuación te explicaremos acerca de la “cocina modificada”, una forma de cuidar tu salud y cocinar tus platillos preferidos, sin perder su esencia.
Esta tendencia consiste en consumir alimentos de forma saludable adaptando la receta para las necesidades de cada individuo, lo cual es de gran ayuda para personas con diabetes, hipertensión, dislipidemia (colesterol y triglicéridos altos), obesidad, entre otros.
Un ejemplo de ello es la reducción de la sal a la hora de cocinar, que se puede sustituir con hojas verdes como el culantro o el apio, dando un sabor muy similar al platillo que ingerís evitando así el consumo desmedido de la sal.
En la actualidad, la ingesta excesiva de sodio se ha convertido en una problemática a nivel mundial. Por esta razón, la OMS se ha propuesto promover la reducción en un 30% el consumo de sal de la población mundial de aquí a 2025, propósito para el que la cocina modificada viene a ser un gran apoyo. Esta entidad también recomienda la revisión de las etiquetas para añadir productos con menor nivel de sodio.
Además, es clave disminuir la frecuencia de consumo de productos que contienen muchas grasas saturadas, ácidos grasos trans o azúcar.
Por ello, en este tipo de forma de elaborar las recetas se recomienda la utilización de alimentos en su versión light o cero azúcar, ya que el resultado final es muy similar y con el tiempo el paladar se acostumbra a la pequeña diferencia en este nuevo sabor.
El cocinar con menos ingredientes calóricos y evitar freír o usar aceite en la comida, ya es un muy buen comienzo para reducir el nivel de calorías y a su vez empezar a crear conciencia de lo que vas a ingerir.
Con la aplicación de la cocina modificada podrás comer todos tus platillos favoritos y despreocuparte por consumir comida dañina. De igual forma, esto tiene que venir acompañado de una forma balanceada, sin abusar de la cantidad de comida que vayás a comer.
Así que ya sabés, si deseás empezar el año con un cambio en tu dieta, cuidando tu cuerpo y disfrutando de lo que comés, empezá a aplicar esta forma de cocinar.