El acelerado ritmo de vida actual, el teletrabajo y hasta las redes sociales han provocado un cambio en todas las actividades de las personas, las rutinas e inclusive los hábitos alimenticios; desencadenando diferentes reacciones en nuestros comportamientos.
Uno de los más comunes es el insomnio, el cual se refiere a la dificultad para conciliar el sueño mantenerse dormido o implica despertarse muchas veces durante la noche. También se puede dar al despertarse a media noche y no lograr dormir más.
El cambio en las rutinas diarias pueden mejorar la calidad del sueño, así lo recomienda la psicóloga Sirey Oviedo, la cual, enfatiza la importancia de reconocer la raíz del problema.
“Es importante identificar qué es lo que me está dificultando dormir bien, si son las preocupaciones, la ansiedad, el temor ante algún problema laboral, personal o cualquier otra situación y después debemos buscar los medios para gestionarlo”, citó.
Asimismo, la especialista en salud mental, da una serie de consejos para tener una mejora en el tiempo de descanso:
– La regla fundamental es dejar nuestra cama solo para dormir o estar con la pareja, y evitar actividades que no estén relacionadas con el descanso.
– Establecer nuevas rutinas en varios aspectos como por ejemplo para despertar, alimentarse o realizar ejercicio. Esto ayuda a que nuestro organismo se regule y favorezca su funcionamiento adecuado.
– De ninguna manera es recomendable automedicarse con el fin de conciliar el sueño, pues estos medicamentos pueden provocar otros efectos, que más adelante, pueden agravar el problema.
-Crear una rutina antes de dormir como leer un libro, tomar un baño y dejar de usar el teléfono media hora antes, pueden ayudar a tener una mejor calidad del sueño.
– Es muy importante analizar tu situación y buscar un profesional en caso de que los síntomas interfieran de sobremanera en tu día a día.
Además, la experta también recomienda darle una mayor importancia a la salud mental, ya que las preocupaciones diarias a nivel personal o laboral, como problemas económicos, guerras, violencia o desempleo, generan esta y otras problemáticas.
“Hay que tener en cuenta que si estas reacciones citadas se vuelven muy agudas desencadenan crisis de pánico, ansiedad muy intensa o tristeza profunda y terminan dejando una dificultad al dormir, lo correcto es visitar un experto” manifestó.
Hoy hay mayor apertura y facilidad para informarse, y si está en tus posibilidades, visitá a un profesional en salud mental con regularidad.
Elaborado por: Emanuel Hidalgo